martes, 21 de septiembre de 2010

Capítulo 7- El acantilado de roca

Hola nuevamente. Para todos aquellos que quieran leer un poquito sobre la 1era entrega de la saga, Los Tres Pergaminos, aquí les dejo un extracto pequeñito del capítulo 7, titulado «El acantilado de roca». Personalmente, es un capítulo que me gusta mucho porque tiene mucha historia detrás, especialmente porque fue el último que escribí (no pregunten por qué el capítulo 7mo fue el último en escribirse si el libro consta de 23 jaja). En fin, traté de sacar un pedacito que no revelara datos que les puedan arruinar la historia XD y que hablara un poco sobre todo este vasto mundo de Tekoa, sus animales, razas o cualquier cosa curiosa jaja. Aquí se los dejo:



«Por fin, la brisa sopló suave y dulce de nuevo (como si por primera vez en los bosques el aire fluyera con libertad). El ambiente mitológico y escalofriante desapareció para dar paso a un horizonte despejado, abrupto y lejano. Allí sobresalía un inmenso desfiladero.

En este sitio, el pisar de los buklias se detuvo y las caravanas dejaron crujir sus ruedas, mientras un largo silencio aparecía. Era curioso ver un espacio así de despejado en ese bosque, hundido en la tierra como si fuese un enorme cráter causado por un meteorito. Daba la impresión de ser una enorme grieta en la cual ningún árbol nacía ni vivía. El hundimiento medía cerca de unos quinientos metros de diámetro, realmente semejaba un barranco hecho por las inmensas manos de un dios, tal era la perfección con la que se había excavado. Semejaba una trampa inmensa de tierra, arrancada del suelo como una pieza enorme de algún rompecabezas, cortada con cuidado y dedicación.

En las alturas de la orilla del cráter (que era donde se encontraban nuestros viajeros) el silencio se mantuvo, aún era impactante ver algo tan inesperado. Frente a ellos el enorme cráter aceleraba la brisa que los golpeaba fuertemente en el rostro.

Ifrius se asomó entre las ramas de un arbusto y logró ver que allá abajo, en el acantilado, había una especie de fortaleza. Era una inmensa muralla de piedra y una enorme puerta de madera con bisagras y cerraduras de hierro. Dentro había muchas chozas de paja, un pozo, una plaza y un par de molinos. Una enorme bestia dorada estaba atada al suelo de la plaza, parecía lastimada. Aparte de eso, solo lograban distinguir una pequeña figura que charlaba con la bestia. Era un hombre sin duda, o quizás un aris, pero a tal distancia sería imposible para cualquiera distinguirlo. Se encontraba envuelto en una túnica que le bajaba hasta los pies, era dorada como la misma bestia, pero brillaba mucho más.

Más allá, se veían montículos de rocas adoloridas de tantas jornadas de martilleo y forcejeo, y otros tantos de hojalatas recién forjadas, espadas, martillos, lanzas y toda clase de armas terribles y afiladas. Montblanc explicó que hace muchos años ese sitio fue un palacio destruido por Abyus. »


«La aldea estaba muy bien equipada. Tenía inclusive un río que la atravesaba de Norte a Sur y amplios campos donde cultivar dentro de la misma muralla. A Yuke le pareció ver una enorme hendija en una sección de la muralla, como una grieta causada por un terremoto o un movimiento de tierra. A través de la grieta pudo ver allá en lo alto y a lo lejos, en la orilla del cráter, un par de sombras. Seguramente serían las dos caravanas solitarias que habían abandonado.

Alrededor de la plaza había muchos vendedores. Vendían buklias, unos pequeños animalitos llamados «dirones» cuyos huevos, una vez cocinados, eran sabrosos; y varios «ecucles», cuya principal función era la de proporcionar abrigo fabricado con el pelo que crecía en sus cuerpos. Vendían pan mohoso, vino muy fuerte, frutas y vegetales un poco sucios. También había animalillos muertos supuestamente para la buena suerte, collares de uñas y pezuñas, y hasta una vieja que decía vender pociones para hacer crecer pelos en los ojos.

—Ven pequeñín, ven chiquitín —le dijo de pronto a Yuke mostrándole un pequeño frasco con un líquido casi negro—. ¿Te imaginas lo bien que te verías con pelos en esos pequeños ojitos de frambuesa? Es lo único que te falta. Si tienes pelo en todo tu cuerpo, ¿por qué no en los ojos? Te apuesto a que serías la sensación entre... las animalitas.

—No gracias, señora —sonrió amablemente Yuke, tirando una mirada a su espalda para notar cómo el resto de sus amigos estaban viendo diferentes cosas por toda la plaza.

—Muchos compran de mis cadáveres —estiró un animal tieso y regordete con los ojos en blanco y lo puso en las manos de Yuke. La vieja era tan divertida como espeluznante—. Estos alejan a los malos espíritus de ti, alejan a los fantasmas y alejan a las viejas como yo.

—Mubel, Mubel, dejad al pobre chico en paz —dijo de pronto un hombre que se colocó a la par de Yuke. Era enorme, mucho más alto que cualquier aris que Yuke haya visto. Tenía la piel color marrón. En sus brazos y rostro había marcas y símbolos blancos. Su largo cabello negro caía lacio hasta su cintura, y unas ojeras casi tan negras como su cabello delineaban sus ojos claros. Toda su presencia era algo tétrica y hasta cierto punto daba miedo—. ¿No veis que no quiere comprar tus feos cadáveres?... ¡Ah! Mucho gusto, pequeño, supongo que no sois de por aquí.

—No... señor.

Yuke volteó y vio que aquel hombre tenía puesta la misma túnica dorada que había distinguido desde el borde del cráter. Sin duda alguna, era el mismo hombre que había estado hablando con la enorme bestia. Los ojos celestes del hombre penetraron directamente en los de Yuke.»


5 comentarios:

  1. En primer lugar, gracias por subir este fragmento. De verdad que estaba muy curioso de leer algo de tu novela y ahora me siento satisfecho, claro que sería genial leerla completa. Te digo esto porque apoyo en un 100% la literatura fantástica escrita en latinoamérica. Es tiempo de que dejemos de estar a la sombra de los escritores de habla inglesa. Estoy seguro de que podemos hacerlo tan bien o incluso mejor.
    En relación con el texto, me parece muy interesante, aunque no puedo opinar mucho de la trama, así que limitaré a tu estilo. Una vez un amigo me dijo que cuando estemos narrando sobre un mundo fantástico evitemos usar palabras como metro o diametro, ya que son palabras de nuestra cultura. Se que esto es difícil, ya que en ese caso tendríamos que inventar un lenguaje nuevo (lo cual es dificil pero no imposible).
    Creo que en general está bien, pero unas cuantas mejoras no le vendrían mal. Nunca estan de más. No sé si leíste "El nombre del viento" de Patrick Rothfuss. El autor dijo que había estado un montón de años "Corrigiendo" el libro. Es decir, siempre encontraremos algo que mejorar.
    Mis mejores deseos con la segunda edición y el resto de tu saga.
    Saludos!

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  2. Muchísimas gracias por el comentario, claro, me parecen bien tus opiniones y las tomaré en cuenta. Aunque pienso que es cierto que no podemos limitar nuestras expresiones solamente porque en dichos «mundos» se desconozca tales (en este caso) medidas. Sería un poco riesgoso y carente de sentido eliminar tales cosas si los lectores, de por sí, ya las conocen de tal forma. Seria como evitar mencionar medidas temporales como los segundos, dias o meses, porque tambien son medidas propias de nosotros y no de este mundo ficticio. Aún así me parece bastante interesante la observación.
    Y en lo de la literatura latinoamericana te apoyo al 100% yo pienso exactamente igual. Hay mucho talento desperdiciado o aún no descubierto, aunque pienso que poco a poco iremos abriéndonos camino en la literatura mundial (Dios quiera jeje). Un guatazo haberte conocido, espero que no te moleste si sigo poniendo comentarios en tu blog sobre tus entradas, es solo que me gusta el blog y está muy interesante =D Un abrazo desde acá

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  3. De nada! Y será un gusto que te pases por mi blog. Más adelante subiré algún otro fragmento (posiblemente descartado) de mi futura novela. Estamos en contacto.

    Javier

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  4. Hola, Fabián. ¿Este texto ya está "editado"? ¡Porque lo veo MUCHO mejor de lo que yo leí! Ahora veo un excelente uso de los guiones de diálogo y me gusta que la palabra «buklias» no esté entrecomillada, como leí en la primera edición. Felicitaciones, el texto está mucho más elegante, ¡me encanta! :D

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  5. Pues sí, es parte de los arreglos que realicé, y de nuevo te agradezco por tus comentarios que me ayudaron bastante para lograr esto =D en fin, ya la 2da edición está en imprenta y saldrá como en 3 semanas, mucho mejor de lo que fue la 1era edición!!!! OuO

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